Vías Lagrimales

Ojo seco y superficie ocular

El film lagrimal es la capa acuosa que baña la superficie del ojo, lubricando la córnea y conjuntiva. Es imprescindible para el correcto funcionamiento del sistema reactivo del ojo y mantenimiento de las estructuras. Su alteración puede acarrear sintomatologías variadas que van desde el ardor y sensación de cuerpo extraño hasta el ojo rojo y dolor. Puede alterarse con la disminución de la frecuencia del parpadeo cuando se fija mucho tiempo la mirada en pantallas, monitores y dispositivos con la exposición a la polución ambiental y sustancias irritantes.

Ante la presencia de alguno de estos síntomas o exposición a factores predisponentes es importante realizar un examen oftalmológico donde se evalúe la cantidad y calidad lagrimal.

La rosácea es una condición dermatológica que se caracteriza por la vasodilatación de áreas centrales del rostro (pómulos, nariz, entrecejo). A nivel de los párpados produce la congestión (blefaritis) de las glándulas del borde palpebral (g. de Meibomio). Así, produce un incremento de su secreción oleosa generando enrojecimiento, ardor y sequedad ocular (ojo seco mucoso) con erosión de la córnea. Si bien la limpieza y los antibióticos locales mejoran la sintomatología, el tratamiento de las zonas cutáneas afectadas con luz pulsada intensa (IPL), es una alternativa actual y efectiva para los pacientes que presentan ojo seco con estas características.

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